dilluns, 7 de març del 2011

WALTON FORD. White Plains, Nueva York, 1960 - Naturalista.





NILA 2.000
Walton Ford, la resurrección del naturalista
por Rafael Osío Cabrices

Cuando el Brooklyn Museum abrió en 2006 una muestra del trabajo de diez años del pintor estadounidense Walton Ford (White Plains, Nueva York, 1960) dio su mejor pared a una de sus obras más impresionantes, Nila (2000). En ella Ford dibujó a un elefante asiático con una larga erección sinuosa, que marcha con mirada enloquecida mientras lo sobrevuelan y picotean pájaros de distintas especies. Algunos son pisoteados por el monstruo, otros tratan de salvarse de él. Un par de carpinteros agujerean sus flancos, un buitre espera el momento de abrirle las ancas, una lechuza yace meditativamente sobre su cerviz. El elefante lleva la punta de una pica rota enrollada con la trompa y tiene los colmillos cortados por la mitad. Es un rebelde de ojos llorosos, acosado por coloridos parásitos. Unas cuantas anotaciones en caligrafía cursiva, decimonónica, identifican algunas de las aves que constelan en torno a él, junto a un croquis del gran mamífero que sólo puede verse de cerca.

La obra tiene la talla de un elefante real, 365.8 por 548.6 centímetros, y está dividida en veintidós paneles rectangulares, todos de tamaño y proporciones distintas, que se pegan uno junto al otro. Esa construcción lleva, por supuesto, a la fábula de los ciegos y el elefante y en su moraleja sobre lo poco consensual que puede ser la realidad. Pero lo más curioso es que Nila, como casi toda la pintura de este artista, es una acuarela sobre papel. Ford practica las mismas técnicas de los artistas naturalistas de la Ilustración, que acompañaron las expediciones europeas por cada nuevo territorio conquistado para producir conocimiento donde luego se producirían marfil, carbón, diamante o caña de azúcar. Como aquellos precursores de la pintura au plein air que se adentraban con sus pinceles en selvas llenas de malaria o páramos frecuentados por carnívoros –en especial el ornitólogo John Audubon, cuyo estilo es el más citado por este remoto heredero suyo–, Ford se vale del lápiz, un meticuloso dibujo posterior con plumilla y luego capas de color con la acuarela, todo con el estilizado realismo del siglo xviii, el de antes de la fotografía. Su representación es anatómicamente incontestable. Pero, a diferencia de los exploradores que de ese modo documentaban la naturaleza, Ford no trabaja para llevar la cuenta de una biodiversidad que recién se cataloga, ni pinta ante el paisaje o un espécimen sangrante. Él recolecta tanto las ideas como las imágenes en un bosque de lecturas que cubre el suelo de su estudio.

La editorial Taschen publicó un libro de gran formato que reúne la obra de Ford desde 1991 a 2008, Pancha Tantra, curado personalmente por Benedikt Taschen. Ahí están Nila y muchas otras piezas de gran formato, como Loss of the Lisbon Rhinoceros (2008), que muestra los últimos momentos de un rinoceronte que se hunde, encadenado, a bordo de una nao, y acuarelas de menores dimensiones, como la extraña serie cubana de guacamayas que salen de frascos rotos, con títulos como La historia me absolverá. Abundan la violencia y la muerte: una implacable competencia darwiniana en la que con frecuencia los pequeños acaban con los grandes. No falta, sin embargo, la ironía, como en N.G.O. Wallahs (algo así como los mandaderos de las ong), en la que un maribú indio de testa pelada mira a cuatro brillantes pajaritos europeos compartiendo una bolsa de bombones Hershey’s. En un apéndice se reproducen los textos que engendraron determinadas piezas; entre ellos, la historia de  la  pantera  fugada de un zoológico que deambuló por diez meses en los Alpes suizos hasta que la cazó un campesino,  o el pasaje de una biografía del capitán Richard Francis Burton que describe su corte de simios en el Punjab, tema de la magnífica escena de caos que cubre las tapas de la edición, The Sensorium (2003).

Ford destila del legado de la edad dorada del colonialismo una iconografía que le sirve para elaborar un comentario de la globalización, de un modo que lo hace inconfundible y milagrosamente original en la vasta diversidad de la plástica contemporánea. Además, logra la nada desdeñable hazaña de ser político sin ser atorrante, de provocar un desacomodo sin perder la autenticidad. Naturalmente, son muy amplias las posibilidades de interpretación de una pintura tan perturbadora y tan generosa en símbolos, que adelanta sus alegorías con contenida elocuencia, tremolando vagos significados ante el espectador sin incurrir nunca en la enunciación explícita. En el ensayo que abre Pancha Tantra, Bill Buford observa que todos los pájaros que picotean al elefante en Nila son ajenos al hábitat surasiático del paquidermo, salvo uno, un loro verde que somete a un alcaudón en la punta del pene del elefante. Buford asegura que la pintura es una versión del testimonio de George Orwell de cuando tuvo que acribillar a un elefante, de joven, en Birmania, y que las aves representan los ingleses imperiales de aquel relato. Pero uno puede pensar en muchas referencias más, en Orientalismo de Edward Said o en los relatos de Pankaj Mishra o Paul Theroux sobre los occidentales fascinados con los swamis de Varanasi. El mismo Buford reconoce que le cuesta creer que haya otro pintor vivo “con tanto que contar”. En efecto, de cada una de sus imágenes se pueden desprender varias historias posibles. Pero, después de atravesar las diversas capas de lectura y de emoción que Walton Ford acumula en sus acuarelas, lo que queda vibrando en quien se asoma a su obra es algo más que la evidencia de su talento: es el desasosiego que nos produce el encuentro con un simio que se parece demasiado a nosotros, pero que está enjaulado y herido, mirándonos como si poseyera una gran verdad que somos incapaces de entender. ~




(Walton Ford, Loss of the Lisbon Rhinoceros, 2008)

La crónica del suceso representado admirablemente por Walton se resume en estas breves líneas:

” El 22 de mayo de 1515, un rinoceronte hindú, procedente del lejano oriente, desembarcó en el puerto de Lisboa, tras un viaje de 120 días. Era un regalo del sultán Muzafar II, gobernante de Cambay (hoy Gujarat) a Alfonso de Albuquerque, gobernador de la India Portuguesa, quien a su vez decidió regalárselo al rey Manuel I, de Portugal. Era la primera vez que un rinoceronte pisaba tierra europea en más de mil años, y la llegada del animal causó sensación. . (…) Complacido con su animal, el rey decidió, a su vez, regalárselo al Papa León X”(…) El rinoceronte, pues, fue embarcado en diciembre de 1515 junto con otros regalos exóticos rumbo a Roma. Durante el viaje, el rey Francisco I de Francia pudo admirar al animal a su paso por Marsella. Sin embargo, al pasar frente a las costas de Liguria, en Italia, una tormenta hizo naufragar el barco y, encadenada, la infortunada bestia no pudo nadar y murió ahogada. Su cadáver fue recuperado en la costa y el cuero enviado a Lisboa, donde fue disecado (…) ”








Uno de los cuadros más apreciados por los asistentes a la inauguración de la exposición ha sido el titulado 'Baba.B.G', en el que se representa cómo un ave intenta alimentar a sus crías tras haber cazado un pescado que a su vez intentaba proteger a sus propios hijos.


SPACE MONKEY.







APUNTE BIOGRÁFICO.

Walton Ford nació en 1960 en Estados Unidos, y desde una edad temprana se interesó por las exposiciones de historia natural de Nueva York, a las que solía asistir con asiduidad, según ya explicó en la rueda de prensa previa a la inauguración de la exposición. (Una exposición que se realizó en Berlín, llamada "Bestiario.")

Ford, que se ha declarado "emocionado" por presentar esta colección por primera vez en Europa, ha explicado que sus cuadros no pretenden representar la "crueldad", sino mostrar "cómo los seres humanos pueden imaginarse la naturaleza", más allá de las enseñanzas de los naturalistas.
En total, cuatro serán los meses durante los que esta exposición, que mezcla el mundo animal con el subconsciente humano, podrá visitarse en Berlín, ya que después emprenderá viaje para dirigirse a la capital austríaca, Viena.


Este cuadro se relaciona con la extinción de la paloma "MARTHA", a causa de la gran persecución por parte de los humanos. http://lanaturalezaquenosqueda.blogspot.com/  Hago reseña del blog de Javier 16 que lo explica muy detalladamente.






23 comentaris:

PACO HIDALGO ha dit...

Impresionante la obra de Ford; que tamaño tiene ese elefante, Dios. Paso a ver inmediatamente el video y a tí te deseo lo mejor para esta semana. Un abrazo.

Mabel G. ha dit...

Qué obra más espectacular. No sabía que existía. Aparte el elefante, con todas las aves de distintas especies a su alrededor. Es genial.
Un abrazo, Clariana !

aapayés ha dit...

Ante la majestuosa pulcritud de tu presencia

Confieso que soy el cielo
El sol,
Las nubes amamantando el tiempo

Confieso que las estrellas
Las dibuje con mis sueños
Iluminando el firmamento de mis sentimientos

Que tus cabellos
Los acaricie palpitando mis deseos,
Y que tu cuerpo
Lo transite coloreando mis pasiones
Elocuentes del que ama

Confieso que no soy nada
Ni nadie en este mundo
Ante la majestuosa pulcritud de tu presencia
Mujer,
No soy el que confisca tus besos
Ni el que marchita tu alma
En añicos de penas,
Soy,
El que respeta tu nombre
Pintado
En el firmamento beso del te quiero

Confieso
Que soy
El que emancipa la palabra
Convirtiéndola en caricia mutilada de ternura,
Mujer
Eres
Luz
Embarazo creador de lo eterno
De lo infinito
Mezclado con el esperma
Quietud erótica de mi cuerpo
Ante la belleza emblemática de tu movimiento
Vida

Adolfo Payés.


Con todo mi respeto y admiración ara la Mujer en estas fechas y el mes de Marzo..


Un abrazo
Saludos fraternos...

clariana ha dit...

¡Hola Paco!
Sí, es impresionante el tamaño de la obra del elefante y pensar que lo realiza con acuarelas...
No conocía a este pintor, fue a través del blog "La Naturaleza que nos queda" de Javier 16 donde lo pude observar por vez primera. Este post se relaciona con la extinción de una preciosa paloma "Martha" como consecuencia de la actitud de los humanos con ellas. Un abrazo.

clariana ha dit...

¡Hola Mabel!
Yo también lo conozco por vez primera gracias al post reciente de Javier 16
Es alucinante la comunicación de este medio, pues todos aprendemos de todos, muchas cosas.
Gracias Mabel. Un abrazo.

clariana ha dit...

¡Hola Adolfo!
Preciosa poesía que le dedicas a la mujer en el día de la mujer trabajadora 8 de marzo.
En cambio yo, siendo fémina me he dedicado a traspasárselo a los animales que todavía están más discriminados que nosotras. Y me gusta mucho que ese día lo reivindiquen los hombres. Gracias.
Un abrazo.

Javier G. Pérez ha dit...

Mil disculpas por llegar tarde. Qué días llevo.
Has colocado a un grandísimo artista que conocí hace poco en el blog de: “Artistas por la Naturaleza”

Tienes unos grandísimos reflejos Clariana. Estos trabajos donde el autor da rienda suelta a sus criaturas me resulta de lo más apasionante. Como ya mencionas el drama de la extinción de la paloma migratoria, quiero recordar de nuevo el gran impacto del cuadro de las palomas, sobre todo, cuando se conoce su historia.

No sé que más decirte, cuando la emoción ofrecida por un pintor que recupera las artes pictóricas del siglo XVIII tan características de la época y que como dices, nos recuerda al genial pintor y naturalista James Audubon, deja un poso de admiración de un surrealismo muy intencionado.
Muchas gracias por el enlace, y sobre todo, por el post.

Abrazos

Algaire ha dit...

Creí que no conocía nada de este artista hasta que llegué a uno de los cuadros que resulta que vi hace poco y era en el blog de Javier 16, cuadro que me impresionó mucho pues la historia que lo acompañaba, la de la paloma Martha, era muy triste por la brutalidad y la irracionalidad del ser humano.
Hiciste un trabajo muy completo por el texto, las imágenes y los vídeos.
Gracias Clariana por enseñarnos tanto.

railsiferradures ha dit...

Bona nit Clariana,
Hace algunos días que estamos en el pueblo y al entrar en tu blog veo esta maravilla, me son familiares algunas de las pinturas pero vuelvo a reconocer mi ignorancia sobre esta obra.
La simbiosis entre la visión naturalista del pasado y la imaginación actual del artista crean un mundo que parece salido de los sueños.
Como ya lo han indicado otros amigos del blog el cuadro de la Paloma Martha es impresionante.
Besos y abrazos de tu familia ahora en Olesa.
railsiferradures

clariana ha dit...

¡Hola Javier!
Cuando vi el cuadro en tu post y toda la historia que relatabas sobre la paloma Martha, me enterneció, porque era horrible esa persecución tan aberrante que sostuvieron hacia ella.
Entonces sentí mucha curiosidad por el pintor que había elaborado ese cuadro y me apresuré a buscar información sobre él. Me encantó su obra y esa incidencia en el drama de los animales en su lucha por la supervivencia, el horror de los animales salvajes en los zoos, como esa preciosa pantera negra que se fuga, la terrible realidad de los pocos ejemplares de tigres que quedan, por haberlos perseguido sin tregua y la amorosa y conmovedora atención de las madres por sus crías, es verdaderamente impresionante.
No te disculpes por venir un poquillo más tarde, las ocupaciones están ahí y son prioritarias, primero la obligación y luego la devoción... dicen por estos mundos.
Un abrazo.

Balovega ha dit...

Buenas noches...

Pasaba por estos lares y al ver la puerta abierta entre a saludarte..

Estelar Walton Ford.. una maravilla, gracias por compartir..

Un besote de buen fin de semana

RosaMaría ha dit...

Qué crónica fantástica que has hecho, me encantó al igual que la obra de este pintor que no conocía. Qué mirada especial para hacer sus acuarelas. Una maravilla. La historia del rinoceronte me conmovió, pobre animal, que desamparado debió sentirse con tanto cambio. Clariana, gracias por visitarme, puedes copiar el mensaje del Tsunami. Y te invito a mirar el post siguiente que te gustará. Beso grandote.

RosaMaría ha dit...

Los videos son estupendos, muy difícil lograr esas texturas con acuarelas. Muy bueno. Besos.

clariana ha dit...

¡Hola Algaire!
Lo de la paloma Martha nos da una muestra de que debemos tratar a nuestros animales con más consideración. Pues las actuaciones actuales con las palomas no difieren mucho de aquello, les sobran porque se reproducen mucho, pero son incapaces de buscar soluciones adecuadas para que se reproduzcan menos y no tener que eliminarlas tan cruelmente, pero no se gastan el dinero.
De poco nos sirve la Historia a los humanos. Un abrazo.

clariana ha dit...

¡Hola Railsiferradures!
Tendrías que leer el post de Javier, si te interesa la historia, es impresionante.
Me alegro de que paséis unos días en Olesa, esta semana blanca me parece que no la van a hacer más, pues no les ha salido como pensaban a los padres, no hay dinero y los niños se tienen que cuidar.
Gracias por vuestra visita. Un abrazo para todos.

clariana ha dit...

¡Hola Balovega!
Me ha gustado lo de la puerta abierta, es bonito, en mi casa de internet puedo tener siempre la puerta abierta, y me alegra de que entréis vosotros.
Me alegra de que te guste la obra de Walton Ford. Un abrazo.

clariana ha dit...

¡Hola Rosa María!
Gracias por tu visita a mi blog. Me alegro de que te haya gustado la obra del pintor naturalista.
He copiado tu post al cual he añadido una fotografía de "El País." Me han gustado tus palabras, concisas e imprescindibles. Gracias. Un beso.

Mabel G. ha dit...

Los nuevos cuadros que has puesto son increíblemente grandiosos y con un mensaje en cada uno.
¡qué imaginación tan fértil la de este artista!
Gracias por avisarme que habías incluído más óleos.
Un beso Clariana
(siempre me sorprendes con estas obras de arte... la mayoría, desconocidas para mí) GRACIAS !

clariana ha dit...

¡Hola Mabel!
Te agradezco que hayas vuelto a pasar por el post, pues aquel día en que lo elaboré tenía muchos problemas con guardar las imágenes, no sé que pasaba en internet, y me quedó bastante incompleto. Y como encontraba muy interesante el tema y el pintor, pues quise poner más y más y pensé que debía avisarte. Un abrazo.

Carlos ha dit...

A mí la que más me gustó fue la mona. Casi casi que parece una mujer (sobre todo tomando en cuenta las zonas genitales y el busto).

Que duda cabe que los humanos tenemos un descendiente común con los monos.

Y pensar que aún existen sectas que rechazan la Teoría de la Evolución. ¡Deberían ver esa pintura!

Un saludo.

clariana ha dit...

¡Hola Carlitox!
A mí particularmente este cuadro me encantó, esa mirada desafiante de madre, que mantiene hacia el infinito con su cría sonriente en su brazo...
Y es cierto que parece una mujer, desconcierta pensar en esos seres que se quedaron por el camino de nuestra evolución.
Había una explicación del cuadro, mal traducida que hacia alusión a que este tipo de monos son muy sexuales y también al matriarcado y al feminismo, pero entre que la traducción era mala y que el tema no me acababa de convencer, pues no lo puse.
Te he podido encontrar aquí al ver el nº 20 y recordar que había 19, pero de poco ¿eh?
Saludos y gracias por tu comentario.

RosaMaría ha dit...

Qué interesante lo que has agregadoen el anterior, sí, verdaderamente además parece que mostrara orgullo y satisfacción.
Muy bueno, lo tuyo, repito. Besos.

clariana ha dit...

¡Hola Rosa Mª!
Me conmovió esa mirada con su pequeñito al brazo tan sonriente y contento con su mamá.
Gracias por tu comentario. Un beso.